En el año dos mil cuatro leí La Sombra del Viento que recuerdo me resultó un libro muy entretenido, muy de mi agrado. Pero es cierto que desde entonces me mantuve bastante al margen del «universo» Ruiz Zafón y todos esos fastos publicitarios. Es como que cuanto más espectáculo veo, más pereza me da acercarme a ese autor.

Es por eso que me apetecía bastante la lectura de este libro, rescatado al parecer tras el fulgurante éxito editorial que supuso para el autor La sombra del viento, ya que había sido publicado antes con bastante poco éxito. Lo cierto es que alguna gente me había hablado bien del libro, pero a mí me ha parecido muy discreto. Incluso asumiendo el género, que es una lectura para adolescente, me ha parecido bastante manido, muy pueril y con algunas estructuras poco creíbles. Una invitación a seguir en mi letargo Zafoniano.