Un clásico entre los clásicos que nos hizo reflexionar mucho y bien en la preceptiva cita del club de Lectura que nos reunió en torno a él.

En general es una novela que gustó muchísimo a todos, sin prácticamente excepción. Me resulta muy interesante la descripción que la autora hace del agreste paisaje de esa zona de Inglaterra. Lo tenebroso que se vuelve todo. Me parece un libro muy muy efectista con exaltaciones de los sentimientos tan elevadas que más bien parecen ser una metáfora de los conceptos que realmente ella trata de reflejar.

A mí me gustan mucho los pasajes de amor desesperado en los que Heathcliff remueve la tierra de las tumbas con sus propias manos, loco de ira y de amor. 

Qué le vamos a hacer, soy así.