Curro Romero, la esencia, Antonio Burgos
By José Luis Pineda on agosto 20, 2009, in ReseñasPara mí Curro siempre fue una especie de mito viviente. Yo tuve la suerte de verlo algunas tardes, sobre todo en Sevilla, cuando la gente seguía esperándolo, tanto tiempo después, y a mí me parecía un señor mayor que ya no estaba para aquello. Sin embargo, me fascinaba la devoción de sus fieles, el romero en las solapas, y el quejido de la maestranza cuando Curro, alguna vez, se abría de capote. Siempre me interesé en cierta forma por aquel mito en vida y descubrí en la boca de otros y en algún que otro vídeo el torero que Curro había sido y descubrí ahí los cimientos de aquellas locuras.
La biografía de Curro escrita por Antonio Burgos me parece un libro extraordinario para todo aquel que guste de la fiesta de los toros. El autor escribe en la voz del torero, algo que al comienzo de la lectura me chocó un poco, pero que después, una vez uno asimila el tono con el que Curro dice las cosas, resultó ser maravilloso. Curro cuenta su concepto del toreo, que es probablemente el mío, de la misma forma que andó siempre con los toros, con suavidad, con calma, despacito. El toreo es acariciar, y eso es lo que hace este libro, acariciar a través de las anécdotas, de la fidelidad a un concepto de pureza, de clasicismo en el toreo. La virtud de saber esperar, como dice Curro, es lo que ha distinguido siempre a sus aficionados. Siempre supieron esperarlo. Porque las cosas, cuando son de verdad, siempre llegan, despacio, con calma, como una caricia, pero llegan. Sólo hay que saber esperarlas.