Ahora, por mor del club de lectura he leído Los detectives salvajes que me ha parecido una novela extraordinaria. Original en la forma y en el fondo, la historia de los realvisceralistas de Méjico me ha cautivado desde las primeras páginas. Después uno indaga y descubre que la novela es mucho más autobiográfica de lo por las similitudes de los nombres (Belano-Bolaño) uno pudiera imaginar. De hecho el personaje de Ulises Lima está basado en un escritor méjicano amigo del autor.

Más allá de eso es una lectura exigente, que no es fácil. Porque quedan muchas historias abiertas, porque la dispersión es la tónica reinante en toda la lectura, y porque la imaginación del lector es más importante que nunca. Para hilar, para relacionar, pero también para saber dejar estar alguna de las múltiples historias que finalmente conforman una sola.